28 de marzo de 2024

El Célebre Discurso de Cariaco (De Andrés Barrios, para Asunción Guzmán)

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La violencia y el despertar

La agitación política y social en Venezuela había irrumpido en toda su geografía nacional, llenandose de violencia, confrontación y renacimiento democratico aquel año de 1947, en la víspera de celebrarse las primeras elecciones presidenciales libres y democráticas, prevista para el día 14 de diciembre de ese año, luego de transcurrir pasmosos y agitados períodos de conflictos militares durante largos años, coincidiendo este evento con las actividades conmemorativas del Tricentenario de la Fundación de la Ciudad de Carúpano, momentos en donde la esfervecencia política era muy evidente entre los principales partidos políticos del momento como: AD, Copei, URD y el PCV que se disputaban en una encarnecida contienda las elecciones presidenciales, tanto en las calles, pueblos y ciudades más apartadas de nuestra región, En esos tiempos de confrontación Política, Asunción Guzmán jefe Civil de la Prefectura de Cariaco, tenía cierta ascendencia por ser un hombre sencillo, militante y agitador social, por esas razones fue el candidato escojido como orador del partido AD, para dar el discurso de apertura en su nativa localidad, que al verse limitado en redactar unas sencillas palabras que le permitiera sembrarse como caudillo local y causar la mejor impresión motivadora a los electores de su partido, acude a su fraternal compañero y amigo Andrés Barrios, militante opositor urredista encargándole que le escribiera conociendo su importante experiencia politica «un buen discurso” para que le diera lectura en un importante acto de masas que se realizaría en la plaza Bolivar de Cariaco, municipio Ribero del estado Sucre, dónde estaría presente con su comitiva, nada más y nada menos que su candidato el reconocido escritor Don Rómulo Gallegos. El ciudadano Andres Barrios, era hijo de Juan Graziani y Rafaela Barrios, Natural de San Antonio del Golfo, bajo los influjos de las copas, un día caloroso y en un popular botiquín de la localidad carupanera, acepta gustosamente el compromiso y comienza a redactarle el referido discurso, pero con el agravante, que muchas palabras y frases eran inapropiadas y sacadas de contexto, añadidas por el grupo de amigos que compartían su ingesta alcohólica a manera de burla, en aquel agobiante y soleado medio día carupanero, convirtiéndolo en un discurso sin precedente alguno, por las diferencias ideológicas de los presentes en el convite, encontrandose en ese momento durante la jarana alcohólica Argenis Pérez, Profesor universitario, quien se destacaría como militante comunista; Tobias Balán, Profesor de literatura, poeta y urredista, personaje muy querido en la localidad carupanera, entre otros, luego de varias horas dan por concluida su «Obra maestra» entre risas y jodederas, ya a muy prolongadas horas de la noche.

Al día siguiente, a primeras horas de la mañana, con evidente síntomas de malestar por la resaca, Andrés Barrios le entrega a Asunción Guzmán el referido discurso y este se despide en veloz carrera muy complacido por el amable gesto de su «desinteresado amigo».

La concentración popular

A tempranas horas del día siguiente, Cariaco se vestía de gala, el pueblo entusiasmado salió a las calles a dar la bienvenida a su ilustre visitante, era notable el gran esfuerzo de toda la dirigencia del partido blanco, para movilizarse a pesar de los grandes sacrificios de su militancia en cubrir la logística y tantos detalles, las calles del pueblo lucian sucias cómo siempre, sus casas descoloridas en su mayoría de bahareque y de tejas marcadas por su pasado colonial, el pueblo no contaba con ningún servicio como: la electricidad, el agua potable, entre otros e incipientes como el servicio de salud, sus calles se inundaban con frecuencia, por las crecidas de su principal afluente natural que las arrasaba y las llenaba de piedras, convirtiendolas en polvorientas al arreciar el agobiante sol, el principal medio de transporte de la población eran los burros y algunos vehículos que de paso transitaban por la precaria vialidad y en algunas oportunidades a veces por falta de pasajeros, eventualmente les prestaban servicio a la población para ser trasladadas a otras localidades lejanas, la muchachada y los niños inocentes como siempre con su ropa pintoresca, corrían muy alegres esperanzados merodiando cualquier oportunidad para exigir caprichosamente algun dulce criollo que le llamara la atencion de los que colocaban en sus bateas los vendedores locales, al presentarse el candidato, hombre de respetable figura y formación intelectual, en un breve recorrido por el sector se da inicio al acto público pautado, con la singular agitación de los líderes locales. VIVA ACCIÓN DEMOCRÁTICA!!!. VIVA EL PARTIDO DEL PUEBLO!!! VIVA ROMULO GALLEGOS!!! Para los organizadores todo el ambiente político lucía perfecto, «aparentemente.’

El discurso

La tradición oral ha conservado el texto del discurso en su memoria de la manera siguiente:

Cuentan que Asunción Guzmán, frente al público y de espaldas a un descomunal jabillo, expresó lo siguiente:

“Compañeros deportivos: hétenos aquí solemnemente instalados, serena la mirada, seguro el porvenir; aquí en Cariaco, con sus ríos caudalosos, sinuosos, brumosos y hermosos; aquí en Cariaco, con sus techos rojos, su blanca torre, sus azules lomas y sus bandas de tímidas palomas que hacen nublar de lágrimas mis ojos: porque Cariaco no es Casanay, ni Casanay es El Pilar, ni El Pilar es Tunapuy, ni Tunapuy es Pantoño, ni Pantoño es Cariaco, y yo estoy hablando precisamente en Cariaco” (grandes ovaciones).

“Por aquí pasó un tal Jóvito Villalba (silbidos y rechiflas) y se fue, pero no importa, porque como dijo nuestra querida compañera Juana de Arco, en un mitin de Acción Democrática en Tucupita, un amor se va ¡cuantos se han ido! Otro amor volverá más duradero y menos doloroso que el ya ido”.

“Aquí está con nosotros el compañero Severo Cortés, que no es severo ni cortés, pero es valiente. El compañero Severo, antes de la revolución de octubre, no sabía leer ni escribir y hoy pesan sobre sus espaldas cartapacios de libros y plumarios, y es de Correspondencias, Actas y Secretario, 192 de la Independencia y 85 de la Federación del año que sigue y cursa”. (Prolongados aplausos)

“Estamos satisfechos compañeros, por la obra creada desde el poder. En los años que tiene el compañero Betancourt al frente de la Junta Revolucionaria de Gobierno, hemos construido nada menos que la Cordillera de los Andes, la Cordillera de la Costa, el Cabo de Tres Puntas, San Francisco, Malapascua, Punta Cardón, Punta Arena y la Península de Araya. Y si no hemos hecho el acueducto de Margarita, a los adecos nos cabe la honra de haber hecho la isla que no es lo mismo”.

Acuérdense compañeros, del compañero José Francisco Bermúdez, que montado en lo alto de este jabillo y mirando hacia el poniente dijo: “cariaqueños, de lo alto de este jabillo, cien siglos os contemplan”; acuérdense del compañero Simón Bolívar, cuando paseaba en las góndolas llenas de belleza, allá en Venecia, con su prima Fanny; y acuérdense también del compañero Jesucristo, cuando con cinco panes y cinco sardinas le dio de comer a cinco mil personas y eso que no había Junta Reguladora de Abastecimiento”.

“Compañeros, fíjense hasta donde llega el sectarismo de los urredistas, el sectarismo marrón, que una obra como Romeo y Julieta, los urredistas dicen que la escribió un tal “Cheskespiare”, claro, porque el “Cheskespiare” es urredista, pero todos sabemos en el partido que esa obra salió de la pluma vigorosa del compañero Domingo Alberto Rangel”.

“Compañeros…yo lo único que les pido es que voten por Rómulo Gallegos para la presidencia de la república. Gallegos es grande en el pensamiento y en la acción; Gallegos es tan grande, compañeros, que es capaz de echarse encima, él solo, la América del Norte, la del Centro, la del sur, Monagas, Anzoátegui, Nueva Esparta y Trinidad. Y abajo la banca, la industria y el comercio”.

Estruendosos fueron los aplausos, los gritos, silbidos y rechiflas…»No se entendieron las últimas palabras». Fin de la cita.

Tiempos pasados

Estos sucesos causaron entre los líderes locales y regionales del partido AD, un ligero resentimiento que no duraría muchos años, contra el principal autor intelectual del discurso, Andrés Barrios, afectados en su más profundo sentimiento adeco, luego con el correr del tiempo fueron sanando las heridas, entendiendose lo sucedido como un hecho anecdótico y jocoso, cuestionandose la mucha ingenuidad o poca malicia, del dirigente adeco Asunción Guzmán.

Luego de transcurrido muchos años del «célebre Discurso de Cariaco» y habiéndose residenciado Asunción Guzmán en la vecina ciudad de Cumana, un periodista de la localidad lo entrevista sobre el referido suceso y le comenta de lo famoso que se había convertido luego de pronunciar el discurso y Asunción Guzmán, mostrando un poco de su singular orgullo respondió: «Ese discurso le dio la vuelta al mundo y a Colombia también «

Apreciados lectores, ¿Que piensan ustedes que pudo haber pasado por la mente de Don Rómulo Gallegos, ese brillante escritor, sensible ser humano, de una formación intelectual incuestionable, luego de terminar de oír el referido discurso?

Los tiempos han cambiado sin duda alguna, desde aquel pasado glorioso y tormentoso, quedando grabado como recordatorio permanente en la memoria colectiva de los pueblos, las anécdotas y muchos momentos extraordinarios que marcaron de historia y dieron orígen a nuestra querida Venezuela.

Fuente de la investigación histórica

* Artículo publicado en el Diario el Nacional

* Entrevista al Econ. Napoleon Barrios Bucce, hijo del veterano periodista Héctor Barrios, hermano de Andrés Barrios.

* Anécdotas del ex-gobernador del estado Sucre Carmelo Ríos. * Entrevista referencial de Asunción Guzmán, prensa Regional del esrado Sucre.

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