29 de marzo de 2024

Prof. Mario Javier Pacheco Morales

Opinión

***Presentado en el programa: “Desde Casa con el Museo y la Comunidad” del Museo Histórico de Carúpano

Carúpano/Opinión.- Gente de distinta edad lanzando conchas de mango en el piso de las calles luego de haber degustado esa bendición de la madre naturaleza; un joven colector irrespetuosamente rompiendo en el rostro de una dulce señora que pudiera ser su madre, billetes de cierta denominación porque en el bus no lo aceptan; seres dedicados al comercio, maquinando cómo estafar al prójimo aprovechándose de su necesidad; conductores irresponsables incumpliendo ante la señalización de los semáforos; personas apropiándose indebidamente de espacios públicos para usufructuar en beneficio particular y en detrimento de la mayoría; entes oficiales abandonando y descuidando su responsabilidad para con los sitios públicos de esparcimiento; la percepción de una absoluta ausencia de aplicación de las leyes. Son estas algunas manifestaciones de lo que hemos denominado el proceso progresivo de deshumanización de la ciudad; es expresión de la crisis del tiempo histórico en que vivimos y que algunos solo la limitan al hecho económico. Sin duda, lo económico es estructural y determinante de la coyuntura, pero, los signos de una descomposición mayor se aprecian en el devenir cotidiano de la ciudad que habitamos; forma parte de, como lo expresa el analista Néstor Francia: “la decadencia ética, la pérdida de valores del espíritu, el materialismo, el pragmatismo y todas esas plagas que nos ofrece la sociedad clasista”.

Ahora bien, ¿Cuál debe ser la actitud ciudadana ante esta realidad? ¿Qué podemos hacer para contribuir a revertirla? Desde nuestra perspectiva, la opción inmediata está en el universo cultural carupanero. Re humanizar a Carúpano; reconstruir el tejido social ciudadano en función de una mejor calidad de vida debe ser el propósito fundamental de los carupaneras y carupaneras dolientes, conscientes y potencialmente actuantes. El sector cultural de la ciudad integrado por pensadores, creadores, artistas, cultores, investigadores, comunicadores, docentes, estudiantes, trabajadores constituye una fuerza de sensibilidad productiva poderosa; de su seno debe brotar la flama que insufle a la sociedad carupanera, el espíritu de superación de la realidad actual y el ánimo para la reconstrucción de las relaciones humanas en nuestra ciudad. Todos, sin ningún tipo de excepción, debemos sentirnos convocados a participar en el proceso de re humanización de nuestro espacio. En este sentido, El Museo Histórico de Carúpano, en comunión con los vecinos del Casco Histórico de la ciudad, sintiéndose convocado a contribuir con la re humanización de este espacio, ha venido desarrollando, desde hace dos años, su Proyecto de Participación Ciudadana “Casco Histórico de Carúpano”, la actividad cultural hasta ahora, ha marcado el camino, sin embargo, el proyecto es de alcance integral y paso a paso se avanza hacia la conjunción de los otros escenarios de participación: el trabajo ambiental, la integración vecinal en una dinámica de formación ciudadana permanente. Es una muestra de lo que podemos hacer por la ciudad que amamos. Lo ideal es que esta iniciativa se multiplique y socialice en toda la geografía carupanera. La distancia entre lo ideal y lo real lo determina la voluntad transformadora del ser social.

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