Abril / 1821 (II)

Camino a Carabobo 200 (9)
Mario Javier Pacheco Morales
Durante las primeras semanas del mes de abril fueron significativos los esfuerzos de ambas dirigencias confrontadas para seguir el espíritu del armisticio. Sin embargo, el testimonio epistolar entre ambos jefes máximos muestra lo que era inevitable. Las proposiciones de Bolívar a La Torre dirigidas a una solución pacífica no pudieron considerarse. Las gestiones de paz que realizaban los comisionados patriotas fracasaron. Bolívar comunica a La Torre que marchaba a Barinas y San Fernando y La Torre responde quejándose de ese “paso inesperado e inconcebible” y fijó el 28 de abril para reanudar las hostilidades. Había dicho Bolívar en su carta del 21 de abril al jefe realista: “Es bien difícil, por no decir imposible, que se concilien de un modo satisfactorio, pretensiones tan distantes entre sí cuando no se examinan con interés las contrarias y se cierra la puerta a toda composición” y, en otra parte, dejando claro la firme disposición de asumir las consecuencias del fallido intento por revitalizar el armisticio afirma: “Si usted refiere a la suerte de la guerra la de estas provincias, por falta de poderes para transar las diferencias, no me queda elección entre combatir o perecer”. La suerte estaba echada; La Campaña rumbo a Carabobo se había iniciado.
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